miércoles, 19 de marzo de 2008

Hágase la luz


Bueno, vuelvo después de algún tiempo, y la verdad es que como hace bastante que no escribo sobre cosas que me pasan, pues ahora parece que cuesta más.

Here we go!.

Sí, we, yo escribo y tú lees.

Y tal.


Bien, resulta que este Lunes 17, me levanto y al encender la luz, no se enciende.¿Qué? ¿Cómo?, que los interruptores no accionan los distintos dispositivos. ¡Qué divertido!. No-ordenador, No-TV(tampoco es que suela verla, pero a falta de pan...). ¡Qué práctico!. No-vitrocerámica, no-calentador eléctrico.
Pues salgamos a la calle, voy a llamar a alguien ya que en mi casa no solo no puedo entretenerme, si no que tampoco puedo ducharme con agua caliente, ni cocinar. La gota que colma el vaso, mi teléfono al ser inalámbrico requiere del envió constante de una señal al aparato. Obviamente no hay electricidad, y tampoco puedo llamar. Recurro al móvil, sin batería. Ni posibilidad de cargarlo.


AISLADO.


Una gozada.

Después de pegarme unos cuantos cabezazos con las paredes para pasar el rato, caí en que tengo abandonado(y a mano) mi ajedrez electrónico. Única posibilidad para las horas muertas.
Y porque mi Lady no me abandona...


En fin, ha sido un día y medio sin electricidad. Pero de nuevo cuento con lo de siempre, y el ajedrez va a su rincón.

1 comentario:

Shinobu dijo...

Si hubiera un apagón general sería el fin del mundo xDD

Aunque me encantaría vivir un ratito así :p